Razones para contratar a un abogado inmobiliario para tus operaciones en 2023

Uno de los sectores más castigados por la situación económica actual es sin duda el de la construcción y, con ello, las operaciones inmobiliarias en general se ven arrastradas por esta tendencia. Son frecuentes los conflictos entre actores como constructoras, promotoras… incluyendo a agencias inmobiliarias y, por supuesto, a los particulares y empresas que realizan movimientos como compraventas de inmuebles. La situación es compleja y, desafortunadamente, también son muchas las sociedades de este sector que se encuentran al borde del concurso de acreedores. 

Por eso, ahora más que nunca es importante contar con el asesoramiento de un abogado especialista en Derecho Inmobiliario que pueda ayudarte a evitar conflictos y a actuar de forma preventiva, renegociando condiciones, dialogando y alcanzando acuerdos que satisfagan a todas las partes.

Si es tu caso, te invitamos a ponerte en contacto con nuestro equipo de abogados. 

Por qué contratar a un abogado inmobiliario

Es frecuente pensar que los asuntos relacionados con Derecho Inmobiliario se centran únicamente en compraventa de viviendas u otros tipos de inmueble, contratos de alquiler… y sin duda estas son dos áreas en las que es básico contar con asesoramiento legal, pero esta rama del Derecho va mucho más allá.

Por ejemplo, son frecuentes los conflictos en el ámbito de quienes se encargan de la creación de nuevas oportunidades inmobiliarias, especialmente si, como ocurre actualmente, la inflación afecta a los precios finales en las obras y las carencias en materia de suministro y transporte amenazan los plazos de ejecución. También incluimos bajo este paraguas los conflictos relacionados con alquileres de locales, naves, oficinas… que pueden verse afectados por la crisis actual, tal y como ya comentamos en este artículo. 

Para que puedas enmarcar las necesidades que puede cubrir un abogado inmobiliario en Las Palmas, estas son algunas de las áreas de trabajo más importantes:

• Contratos de compraventa de inmuebles.
• Contratos de alquiler.
• En general, redacción, revisión y negociación de todo tipo de contratos relacionados con el sector inmobiliario (arras, compraventa, alquiler…).
• Reclamación de deudas. 
• Casos de ocupación, desahucios…
• Asesoría legal en operaciones relacionadas con inmuebles existentes, en plano o en proceso de construcción.
• Divisiones de copropiedad.
• Conflictos en la comunidad de vecinos.
• Transmisiones patrimoniales, herencias, donaciones…
• Asesoría en regímenes de edificios y copropiedad.
• Grandes operaciones inmobiliarias.
• Conflictos entre empresas del sector de la construcción .
• Reclamaciones dinerarias entre empresas y profesionales, cumplimiento de plazos.
• Licencias urbanísticas, de obra… y demás trámites con la Administración.
• Vicios en la construcción, obras no consentidas, reclamaciones ante aseguradoras…
• Procesos por embargo, reclamaciones por incumplimientos de contratos, etc.
• Insolvencias y procedimientos concursales.
• Cumplimiento normativo en empresas de la construcción. 
• En general, defensa en procedimientos en materia Laboral, Civil, Penal, Administrativo… relacionados con este sector. 

¿Cuáles son los retos del sector de la construcción en 2023?

Los expertos coinciden en que uno de los sectores más afectados por la actual situación económica es el de la construcción. Esta realidad se extiende inevitablemente al mercado de la vivienda y, de hecho, se pronostica que comprar o vender vivienda en 2023 supondrá enfrentarse a retos legales importantes, relacionados con la inflación, posibles imprevisto en la compraventa (plazos, precio encarecido…)

Por eso es más recomendable que nunca dejarse asesorar por un equipo de abogados que conozca en profundidad los retos y herramientas legales que existen a tu alcance en cada situación.

Algunos datos que ilustran la situación que viene son los elaborados por el Banco de España, que ya anticipa que la inversión en vivienda seguirá ralentizándose lo que queda de año y se prolongará durante 2023. Según su último ‘Informe trimestral de la economía española’, los indicadores marcan una clara «pérdida de dinamismo» durante los meses de julio, agosto y septiembre de este año, que se acelerará en el primer semestre del próximo ejercicio.

Además, el informe ‘Situación España de octubre de 2022‘, publicado por el centro de estudios económicos BBVA Research, reduce sus previsiones de inversión en vivienda para 2023 desde un 3,2 por ciento de incremento interanual que sostenía el trimestre pasado hasta un crecimiento de apenas el 1,3 por ciento. 

En lo referente a la obra nueva, los últimos datos oficiales del Ministerio de Agenda Urbana hablan de la congelación del mercado: los visados de obra nueva durante el último año solo crecieron un 0,3 por ciento respecto al mismo periodo de 2021, y se espera que esta tendencia a la baja siga manifestándose durante 2023.

Entre los ingredientes que han provocado este escenario nos encontramos principalmente con la inflación y el encarecimiento de la financiación, el aumento de costes en los materiales de construcción…  y el miedo a grandes inversiones en un periodo de incertidumbre económica y política. Muchos proyectos e inversiones se frenan mientras el margen de ahorro de empresas y familias se reduce. 

Todo esto se traduce en que, si nos lanzamos a operar en el sector inmobiliario en el momento actual, debemos hacerlo protegidos con un buen escudo legal y una amplia previsión de escenarios futuros en cualquier contrato que formalicemos. 

En este sentido, estos son los ámbitos de ayuda más importantes en el escenario económico actual: 

• Redacción de contratos. Los contratos del sector inmobiliario deben ‘armarse’ mejor que nunca e incluir cláusulas flexibles pero bien construidas que ayuden a protegerte ante cualquier imprevisto. Además, es importante que prevean vías de negociación extrajudiciales para que, en caso de conflicto, se pueda alcanzar un acuerdo de forma más rápida, sencilla y económica.
• Renegociar condiciones. Como ya adelantábamos, se puede dar la necesidad de renegociar condiciones, especialmente en un entorno cambiante en el que todo se altera constantemente. Puede que te hayas comprometido a una obligación a la que ahora no puedes hacer frente por una causa sobrevenida, por ejemplo. El diálogo puede ayudar a alcanzar acuerdos razonables y justos, atendiendo a la realidad del momento.
• Adelantarte a posibles problemas. El objetivo es que estés protegido y blindado a futuro y por eo el enfoque preventivo es clave. Tu abogado debe ayudarte a identificar posibles problemas futuros en los que es probable que no hayas reparado, aportando soluciones preventivas. La experiencia dilatada y un profundo conocimiento de la ley y la jurisprudencia hacen posible este tipo de asesoramiento de calidad.
• Poner en valor tus derechos. Muchas veces nosotros mismos desconocemos cuáles son nuestros derechos y pasamos por alto situaciones en las que podríamos reclamar. Por eso un buen abogado inmobiliario es tu mejor aliado para que nos se te escape nada, siempre partiendo del equilibrio y de la seguridad jurídica, con herramientas de negociación firmes pero amistosas.
• Evitar la insolvencia y proteger las cuentas sociales. En el caso concreto de las empresas del sector de la construcción, es tiempo de tomar decisiones precavidas y bien armadas jurídicamente. Ante el más mínimo riesgo de insolvencia, acude a un equipo de abogados: actualmente existen herramientas de negociación tempranas con las que esquivar un potencial o posible cierre de la empresa. 

Si necesitas ayuda de un abogado inmobiliario en Las Palmas, ponte en contacto con nosotros.